¿PODEMOS CONFIAR EN LOS POLÍTICOS PROFESIONALES?
Existe una gran distancia, un total alejamiento de los políticos, de los representantes públicos...
Ese divorcio es una realidad y se hace evidente cuando entramos en la campaña electoral, dado que todos los que nunca vemos, aparecen a "vendernos" todo tipo de paraísos, ofreciéndonos las mejores ofertas y "viejas novedades" que suelen encandilar a los más ingenuos e incautos...
¿Podemos confiar en los políticos profesionales?
Se acerca el circo electoral y muchos necesitamos creer que hay soluciones y posibilidad de cambiar y mejorar la confusa situación actual, donde impera la precariedad y la incertidumbre vital para la gran mayoría de personas, para la mayoría de mortales...
Pero un dato, una realidad debemos recordar: hay una gran distancia, un total alejamiento de los políticos, de los representantes públicos...
Ese divorcio es una realidad y se hace evidente cuando entramos en la campaña electoral, dado que todos los que nunca vemos, aparecen a "vendernos" todo tipo de paraísos, ofreciéndonos las mejores ofertas y "viejas novedades" que suelen encandilar a los más ingenuos e incautos...
Los que vivimos en Valencia, sabemos bien que no hay cambios radicales, pues los que ayer nos despreciaban de manera rotunda y arrogante, hoy no pueden ser nuestros "amigos" si no hay una excusa o interés oculto...
Desde nuestra pequeña entidad, reclamamos al PSPV-PSOE que se pronuncie contra la violencia urbanística y la corrupción que ha generado el desgobierno del Partido Popular en el País Valenciano, condenando el Pelotazo del Mestalla y la Copa de América...
He leído con atención las noticias que han aparecido en los mediocres y pueriles medios valencianos de "comunicación" sobre el programa electoral del PSPV-PSOE.
Es evidente e indudable que todos los políticos profesionales suelen emplear un lenguaje confuso, plagado de tópicos, para evitarse "problemas" futuros. Pero en el caso actual, con ciertos temas candentes, y que afectan a la convivencia y al futuro de nuestra ciudad, de nuestra Comunidad... los militantes cívicos y las personas comprometidas necesitamos saber que el Partido Socialista del País Valenciano va a tener una mayor y sistemática presencia en los barrios periféricos, asumiendo y canalizando realmente las iniciativas y demandas que algunos colectivos defendemos con toda la lógica desde hace muchos, muchísimos años...
El tema del "Pelotazo del Mestalla" no es un asunto baladí, pues nadie duda ya que es uno de los mayores casos de corrupción acaecidos en España, un verdadero disparate urbanístico, financiero, ambiental... por no hablar del alto grado de manipulación ejercido por algunos medios de "comunicación", verdaderos paradigmas de terrorismo e intoxicación.
Un aspecto que debe ser recordado y valorado es el de las "agresiones" verbales y amenazas sistemáticas que algunos vecinos hemos padecido recientemente, por el simple hecho de intentar ejercer nuestro constitucional papel de ciudadanos, de personas...
Sería positivo y altamente recomendable, que el Partido Socialista no tuviera miedo de condenar toda la enorme violencia y la actitud gansteril y delictiva que ejercen ciertos "medios de comunicación" y ciertos empresarios y promotores urbanísticos, pues si los que quieren o dicen ser nuestros representantes no tienen una actitud frontalmente clara a la hora de defender los DERECHOS HUMANOS Y CONSTITUCIONALES... el resto de mortales y de ciudadanos anónimos, no tendremos ninguna confianza en el sistema y en las organizaciones políticas, sindicales, sociales...dado que no se pronuncian claramente a favor del derecho a participar, dado que tienen miedo a la hora de proceder a denunciar lo injusto, lo innecesario, lo ilegal...
Si no hay participación activa de las personas en los asuntos públicos, si hay una inhibición ciudadana palpable, es por la sencilla y evidente razón de que nuestros representantes públicos no saben o no quieren representarnos, atendernos, escucharnos...
Podemos afirmar que los políticos valencianos actuales, no saben o no quieren ser referentes, puentes activos, visibles y cercanos entre los ciudadanos y las instituciones... A las pruebas me remito.
Necesitamos referentes públicos próximos, que no tengan miedo a escuchar, a canalizar, a comprender las propuestas e iniciativas que emergen y surgen de las personas comprometidas, de los militantes sociales y culturales.
Por eso algunos pensamos que ya es hora de que los partidos políticos de izquierdas y los sindicatos, denuncien y hablen de todo aquello que es innecesario y aberrante para favorecer y estimular la convivencia y el desarrollo personal y colectivo.
Valencia es algo más que una competición deportiva elitista o un estadio deportivo privado. Las ciudades no son espacios exclusivamente turísticos; son zonas comunes para que la vida pueda ser vivida de manera amable, equilibrada, armónica, serena...
Los mortales reclamamos y exigimos la presencia diaria y cercana de representantes públicos en todo tiempo y lugar.
Por ello, es imprescindible que exista la figura del concejal de barrio, dispuesto a escuchar y atender las propuestas, denuncias e iniciativas de cualquier persona.
También conviene que los partidos introduzcan mecanismos para evitar la existencia de clanes o mafias internas, limitando los mandatos a un tiempo concreto. El clientelismo es la causa de todas las corrupciones presentes y futuras, así como de la actual y profunda desconfianza ciudadana.
Estimamos imprescindible que El PSPV-PSOE se pronunciarse contra la violencia urbanística y la corrupción que ha generado el desgobierno del Partido Popular en el País Valenciano... Por ello, nos molesta que no hablen y condenen el "Pelotazo del Mestalla" y se comprometan a la creación de albergues y espacios destinados a la rehabilitación integral de los colectivos que padecen exclusión y marginación...
Es un hecho probado que los ciudadanos nunca nos hemos opuesto, ni nos opondremos a que los municipios disfruten de “un urbanismo adecuado”, pero también es una realidad que el proceso urbanizador debe estar siempre supeditado a las necesidades reales y vitales de los ciudadanos, haciéndose un uso correcto y prudente de los recursos existentes, así como se favorece el control basado en la participación ciudadana de la planificación local. También queremos insistir que los beneficios económicos deben recaer siempre en los ciudadanos y no en una persona o entidad jurídica privada, con ánimo de lucro.
En los casos que existan proyectos de “necesidad social” demostrada, se deben salvaguardar los derechos de los propietarios, no solo reconociendo el valor real de sus propiedades, si no reconociendo el valor de su esfuerzo en cada caso individual y de las molestias y menoscabos sufridos.
La corrupción política y económica es tan vieja como el ejercicio del poder. Corrupción es sobornar para obtener algún beneficio, pero también es extorsionar, malversar dinero público y, muy especialmente, apropiarse de lo que es de todos. Y de todo eso sabemos mucho en España, país experto en todo tipo de corrupciones y vulneraciones de la legalidad, dada la falta de vida democrática que padecemos gracias a la larga dictadura fascista que hemos arrastrado durante tantos y tantos años.
Consideramos que la construcción de un estadio deportivo privado en un solar de titularidad pública no es una “necesidad social” demostrada, afectando negativamente a toda una población que vive en un entorno sumamente degradado por los altos niveles de tráfico, contaminación acústica y atmosférica que padecemos a diario. No olvidamos la total falta de espacios ajardinados, viviendas sociales, residencias, bibliotecas, centros educativos, hogares para nuestros mayores, centros juveniles, espacios destinados a la cultura participativa, talleres de empleo…
El crecimiento urbanístico y los grandes eventos obedecen a la codicia, a la avaricia de ciertos promotores, no consitituyendo un factor que genere riqueza, empleo estable, tal y como han demostrado notables y prestigiosos economistas. Por eso nos irrita el apoyo que manifiesta el gobierno de España hacia la Copa de América, una competición elitista que no va a generar ningún beneficio tangible y real a los ciudadanos valencianos.
El Ayuntamiento de Valencia tiene que tener como verdadera prioridad y obligación, atender y canalizar las quejas, propuestas e iniciativas que los ciudadanos elaboramos y ofrecemos, con objeto de favorecer y consolidar la convivencia armónica, plural, digna, libre, participativa y equilibrada de todas las personas que conformamos el tejido urbano.
No entendemos ni aceptamos el permanente desprecio y el comportamiento irracional y aberrante del actual equipo de gobierno popular, obsesionado en crear zonas marginadas y favorecer a empresas privadas en detrimento de las emergentes y visibles necesidades que padecemos la gran mayoría de ciudadanos.
Los grupos políticos que concurren a las elecciones en mayo, deben pronunciarse y comprometerse a luchar y erradicar la corrupción y los abusos urbanísticos, ambientales, sociales, asistenciales e institucionales... que padecemos en Valencia, en la Comunidad Valenciana.
Decir NO a la construcción de un estadio privado en el terreno municipal sito en Doctor Nicasio Benlloch/Avenida Cortes Valencianas, es una obligación que deben asumir todos los partidos que se dicen democráticos, pues volvemos a recordar a todos los despistados y desmemoriados políticos profesionales, que el citado espacio es un terreno público que debe ser destinado a zona polideportiva municipal, tal y como contempla el Plan Director de Instalaciones Deportivas del año 2000, aprobado por el Ayuntamiento de Valencia, con el beneplácito y las bendiciones de la Generalitat Valenciana.
También deben crearse centros asistenciales y de encuentro en cada uno de los barrios de Valencia, permaneciendo, abiertos las 24 horas y donde puedan estudiar, jugar, hablar... padres, hijos, ancianos, transeúntes... Lamentablemente crece la pobreza extrema y la marginación, a pesar de que nadie quiere hablar y reconocer la existencia de legiones de "personas invisibles" en Valencia, en esa Valencia que intenta vender Rita Barberá y sus palmeros... Tras el diseño y la propaganda, se oculta una realidad terrible y lacerante. Nada puede ocultar la miseria y la zozobra que padecen grandes sectores de la población en Valencia.
Las ciudades vivas deben crear espacios neutrales y de acogida para todos, para nativos y visitantes que padezcan o sufran situaciones de precariedad, de enfermedad, de soledad extrema... Las personas deben ser la prioridad. Para ello, no hace falta crear grandes edificios emblemáticos, pues hay experiencias exitosas, que demuestran que con pocos recursos, se pueden atender y resolver numerosos problemas humanos. Lo único que hace falta para dar respuestas, es voluntad y decisión política, comprometiendo e ilusionando al conjunto de la sociedad en iniciativas terrenales, claramente enfocadas a la participación, a la implicación directa de los ciudadanos.
Los grandes e innecesarios eventos, que no favorecen ni consolidan la llegada de nuevos oleadas turistas, no generando empleo estable ni riqueza, deben ser sustituidos por acciones que estimulen y consoliden la convivencia, la creación de trabajo real y duradero, en áreas como la atención socia-cultural, la sanidad pública, la educación infantil, la conservación, protección y rehabilitación de edificios singulares y viviendas degradadas...
Hay que huir de las grandes mentiras y de los disparates urbanísticos y turísticos aberrantes, dado que hay otros mundos después de los pelotazos y las corrupciones que generan las Copas de América y las competiciones automovilísticas...
Valencia, mejor dicho, sus mediocres y deficientes representantes públicos, se pasan el día imitando a ciudades como Barcelona, algo que resulta absurdo, pues las zonas urbanas deben enfocar su crecimiento y desarrollo en función de las necesidades ciudadanas, de sus carencias y peculiaridades. No debemos focalizar toda nuestra vida personal y colectiva en ser un simple reclamo turístico circunstancial, dado que hay muchas personas que necesitamos vivir con dignidad todos los días, antes que ser simples y vulgares camareros o guías exóticos...
Las ciudades abiertas, libres y vivas no necesitan de eventos intergalácticos, Copas de América y costosos disparates urbanísticos o contenedores seudo-culturales para que la vida de las personas pueda transcurrir amable y dignamente.
Los ciudadanos necesitamos espacios verdes, zonas de encuentro y desarrollo interpersonal, locales para favorecer y consolidar la creatividad en aras a resolver nuestros conflictos y dudas emocionales, laborales, vitales, sociales...
Hay que cambiar el actual e improductivo modelo de ciudad y de relación socio-laboral e interpersonal, para crear y extender un nuevo concepto, donde prevalezca el respeto a la vida privadal y colectiva, visiblemente solidaria y alejada de las consignas competitivas que impone el neoliberalismo con su despiadada y cruel irracionalidad.
Pero para lograr una convivencia armónica y con mayor nivel de equilibrio, los representantes institucionales, las organizaciones sociales, los políticos profesionales deben dejar de ser profesionales para volver a ser ciudadanos de a pie...
Nuestros referentes y representantes públicos no tienen que tener miedo a condenar la "lógica" del sistema actual, asumiendo los retos e iniciativas radicales y críticas que ofrecemos ciertas personas y colectivos. Sin un componente utópico, no es posible ser una persona "realista" y pragmática.
Si los que dicen ser nuestros representantes son simples empleados profesionales, dudo mucho que podamos mantener una relación de respeto y confianza hacia ellos, pues es evidente y probado que ellos, no sienten ni viven nuestros mismos problemas y conflictos sociales, laborales, urbanísticos, culturales... Creo que es imposible confiar en los actuales políticos y representantes sindicales, dado su total alejamiento, dada su total distancia...
Para conocer algo en toda profundidad, uno debe vivirlo y sentirlo como suyo.
Mientras los políticos sean profesionales, no podremos confiar plenamente en ellos, dado que asumen un rol, un papel totalmente diferente al de ciudadanos, al de mortales.
Cercle Obert de Benicalap... (http://www.iberica2000.org/es/Articulo.asp?Id=1110)
Iniciativas Sociales y Culturales de Futuro.
marsegan@hotmail.com
Los equipos de Ibérica 2000, te recomiendan...
Para que saques, tus propias conclusiones...
* A toda la información, sobre la gravísima manipulación de las realidades y de la corrupción de algunos medios de comunicación prostituidos ante los intereses del dinero... (Enlaces...)
* El Europarlamento condena el urbanismo en Valencia, Madrid y Almería (Enlaces...)
* A toda la información alojada y relacionada desde Ibérica 2000, con el Urbanismo desaforado en la Península Ibérica... (http://www.iberica2000.org/Es/Busquedas.asp?Palabra=urbanismodesaforado) (A numerosos artículos...)
Más información de ESCÁNDALO, relacionada en Ibérica 2000:
(Crímenes de corrupción, que hipotecarán de por vida a los ciudadanos valencianos...)
* Asojoven insta a la ministra Cristina Narbona, a que investigue el vertedero en la Murada (Enlaces...)
* Detenido y puesto en libertad, el empresario que sigue enterrando las basuras a la Diputación de Valencia
* Basuras procedentes de Barcelona, se entierran en Alicante.
* El Plan Eólico de la Comunidad Valenciana, ante la Comisión de Peticiones del Parlamento Europeo
* Anuncian la apertura del huerto solar, más grande del mundo
* Sigue el robo del agua, en la cuenca hidrográfica del Segura... (http://www.iberica2000.org/Es/Articulo.asp?Id=3235) (Hace falta una gestión adecuada del agua, por parte de las administraciones autonómicas...)
>> Autor: Antonio Marín Segovia (14/04/2007)
>> Fuente: Cercle Obert de Benicalap. Valencia.
(C)2001. Centro de Investigaciones y Promoción de Iniciativas para Conocer y Proteger la Naturaleza.
Telfs. Información. 653 378 661 - 693 643 736 - correo@iberica2000.org